Incertidumbre, esa era la palabra que mejor define las sensaciones previas al debut en lo que se ha llamado “nueva normalidad”. Evento especial, marcado por un protocolo de seguridad sanitaria sobre el que se dirigían millones de miradas de este deporte. Prueba pionera en nuestra geografía en este extraño periodo, y 127 participantes, muchos menos del cupo. Las dudas aún laten muy fuerte. Madrugaban tres compañeros rosas, cada uno desde sus respectivas localidades de residencia, y poniéndose camino a Guadamur, localidad toledana que les recibe con su imponente castillo y unas calles empinadas que hacen intuir una carrera que exigirá un esfuerzo importante. Y el calor endurecería aún más la jornada. Por no hablar ya de la inactividad competitiva.

5’6 km es una distancia para no especular, y hay que correr a tope desde el inicio. Dos subidas largas y duras que incluía el circuito, así como dos tramos de camino de tierra muy irregular y bacheado, (dos vueltas habría que dar) hacían que efectivamente se cumpliera el vaticinio, convirtiendo este regreso a la competición en un sinónimo de esfuerzo y sacrificio Pero eso el es atletismo, y por ello nos apasiona.

Por parte de PHI Grupo Polideportivo se encontrarían Alfonso, Álvaro Infante y Jesús Galiano, dándose ánimos antes de la carrera, y mascarilla en rostro, poniéndose en acción al mismo tiempo que van retirando la protección durante la recta de salida. Sensaciones buenas en general por parte de los rosas. Alfonso sería el primero en completar la prueba, respondiendo las piernas en lo concerniente a fuerzas, y a la espera de ir encontrando la agilidad y chispa adecuadas. Es cuestión de entrenamiento y tiempo (prisa no tenemos). Tiempo para él, 00:21:44 (10:44-11:00, cada vuelta), puesto general 41°. Puesto Veterano A (40-49) 14°. Por su parte, Álvaro se mostraba motivado, con ganas de más, y rápido en la segunda vuelta, firmando un 00:25:18 (12:42-12:40), puesto 76 de la general y 38 de la categoría Senior. El almagreño Jesús, crono de 00:26:09 (12:40-13:33), puesto 81 de la general, 24 de la categoría Veterano A, era algo más nostálgico, sintiendo cómo el protocolo cercena en cierto modo el alma del evento. En todo caso, para la mayoría de los participantes, la incertidumbre previa se tornaba en satisfacción e ilusión por haber vuelto a disfrutar de esta pasión llamada ATLETISMO. Nos vemos en la próxima!