XXII MARATÓN DE ROMA
(10-04-2016)
Roma, ciudad eterna, ciudad abierta; capital del antiguo imperio y urbe grandiosa en todos los tiempos. Allí ya conquistaron sus calles en un maratón dos de los nuestros durante su luna de miel, Fátima y Rafa, en 2014, y hoy sobre sus mismos pasos otro GP Phi Polideportivo lograba la medalla al mérito de hacer meta sobre los duros 42,195 kms que Roma presenta antes de abrir de par en par las puertas del Eliseo maratoniano.
Bermejo sería el hombre, y Lourdes la gran mujer tras el guerrero, clave en su asistencia y ánimo desde la barrera. El de Almodóvar llegaba a la capital italiana con la mochila repleta de ilusiones, pero también con un peso (y a la vez un orgullo dentro de sí) que lastraba sus piernas pero engrandecería su espíritu de equipo: los 21,097 kms disputados siete días antes en Bolaños a mayor gloria del conjunto. Un esfuerzo que GP Phi Polideportivo no sabrá nunca cómo recompensar, pues su aportación resultaría clave para la gran puntuación obtenida allá en la clasificación por clubes, sin duda hipotecando sus mejores posibilidades hoy, en un día especial.
La mañana se presentaba calurosa, y también con cierto viento. Los factores meteorológicos no doblegaban el ánimo de Bermejo, dispuesto a probar sus fuerzas contra la distancia y los factores que amenazaban en su contra. Los primeros kilómetros todo marchaba según lo previsto, clavando sin problemas un ritmo de 04:15 que le ponía en perspectiva de incluso derribar la barrera de las 3 horas, algo posible, a priori, dadas sus marcas y la dilatada experiencia en la distancia, pero arriesgado si tenemos en cuenta el hecho comentado. Y es que la competición llevada a cabo una semana antes estaba anclada en su organismo, y se haría manifiesta a partir del kilómetro 25, cuando nuestro compañero perdía ritmo por momentos, pasando a ceder terreno desde ese prometedor paso por debajo de la hora y media en la mitad de trayecto hasta luchar por mantenerse en carrera con alguna opción de batir su marca personal (Berlín 03:11:28, en una carrera de manual) en el sufrido tramo final.
Dado que nuestro gladiador es tozudo, y muy fuerte de espíritu, en su mente reformulaba la prueba ante la adversidad, peleando ahora contra la fatiga, sabiéndose tocado pero jamás hundido, tirando de escudo para conquistar nuevamente la distancia y de paso darse la enorme satisfacción de lograr ese mejor registro personal con 03:10:02. Al término, muy contento pero tremendamente cansado, manifestaba no arrepentirse en absoluto, al contrario, lo volvería a hacer, de haber contribuido en Bolaños a la buena marcha del club en la clasificación del Circuito Provincial, aun sabedor de que muy probablemente este esfuerzo ha condicionado su rendimiento en el maratón. Enhorabuena. Otra medalla al historial propio y al del equipo. Nosotros agradecemos tanta voluntad y generosidad. Estamos contigo. Recupera fuerzas, pues te necesitamos en la formación. Nos vemos en la próxima!
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