XXVII TROFEO SÁNCHEZ MENOR DE PUERTOLLANO. 2 kilómetros.
(23-07-2016)
Elsa: Trofeo Primera Veterana A
En la tarde noche del sábado 23 de julio, la asociación de vecinos “El Poblado” celebraba en su barriada el XXVII Trofeo Sánchez Menor, dedicado a un mito del atletismo de Puertollano y comarca. Esta prueba es una de las actividades programadas por esta asociación de vecinos en su V Semana Cultural, organizado conjuntamente con el ayuntamiento de Puertollano. El homenaje a un clásico que sigue dando batalla con su implicación en las organizaciones deportivas contaría, por parte de nuestro equipo, con otra figura ilustre, fundamentalmente por su carácter pionero en la historia de GP Phi Polideportivo.
Nos referimos a Elsa, segunda mujer tras Fátima en colocarse la elástica del club en competición, afrontando desde entonces el gran desafío que supone decirle al mundo lo preparada que estás y tu verdadero nivel, más allá de cualquier suposición. Demostrar el movimiento, corriendo.
Elsa, tras la prueba. |
Y es que colocarse un dorsal puede parecer un asunto baladí en nuestros días, pero no lo es en absoluto, y mucho menos para una mujer nacida en 1975, un año, que aunque cercano y preolímpico (Montreal 1976), aún no contemplaba en el programa de los cinco anillos el atletismo de fondo femenino. No sería hasta 1984 cuando veríamos mujeres fondistas bajo la antorcha. Ahora, a nivel profesional, prácticamente y por fortuna para todos, las mujeres corredoras de larga distancia son colocadas en el mismo pedestal de reconocimiento que sus colegas varones, pero la pequeña Elsa no contaba con referentes cuando jugaba en el colegio. Al contrario, crecía en un mundo plagado de (más) prejuicios sobre el deporte femenino. Hay que conocer la historia para comprender la valía y el valor de nuestras deportistas. Es urgente desterrar la ignorancia para poner en su sitio a las grandes damas de nuestro deporte popular. El premio de Elsa en Puertollano, resultado primera “veterana A” es el justo reconocimiento a su presencia desde hace años, a su determinación y esfuerzo. Allí estaba, como estuvo el primer día que decidió ponerse un dorsal y competir con la camiseta de nuestro equipo. Y tras ella llegaron más, escribiendo páginas doradas del club. Nuestro respeto es infinito para esta corredora que se atrevía con la media maratón cuando pocas lo imaginaban. Afortunadamente, el mundo evoluciona. Despacio, es cierto, pero lo suficiente como para celebrar que Elsa sigue entre nosotros. Enhorabuena. Nos vemos en la próxima!
PD: Su hija, la pequeña Claudia, ya sigue los pasos de mamá…Hay cantera. Hay esperanza.
Claudia, la más pequeña de ambas, nos enseña su medalla. |
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