José Ángel Pérez
Corredor a Fondo
José Ángel Pérez. Querido por su forma de ser, y muy respetado por el esfuerzo que pone en cada carrera. No puede entenderse el presente de este club sin su luminosa presencia. Galardonado en el 2019 con el Premio Impulso de PHI Grupo Polideportivo, nuestro simpático compañero derrocha energía y buen humor en un grupo que ha alcanzado cotas significativas en competición gracias a conjugar diferentes discursos que, de rosa, casan de maravilla. Y es que en su persona se demuestra cómo es posible enfocarse en cada carrera, sacando lo mejor de cada uno, pero sabiendo alejar cualquier poso de mayor gravedad, nocivo a la larga para un corredor popular, que es un aficionado a fin de cuentas. Hoy nos acercamos a un amigo muy especial. Genio y figura. Único. José Ángel Pérez. Un nombre para la leyenda rosa.
Gracias por atendernos, ¡qué importante contar con compañeros que piensan en cómo impulsar el ánimo del grupo!. ¿Qué suponía para ti ser reconocido por el club en este sentido, con el Premio Impulso 2019?
Me encantó, y sobre todo compartirlo con el gran Rudy. Todos los reconocimientos son bienvenidos. Creo que los dos hemos impulsado a nuestra manera las ganas del encuentro rosa más allá de la competición, clave para plasmarlo en carrera, a la hora de competir. Un orgullo.
Además, el año del campeonato. Cuando se lucha por un título, el estado anímico es crucial, ¿lo entiendes también así?
Es fundamental. En carrera indudablemente manda el estado de forma, pero también tiene mucho que decir nuestro cerebro, y por supuesto que se corre mejor cuando llegas a la salida con una sonrisa y el ánimo por las nubes. Invito a no ser llorón antes de las carreras, en esos momentos previos que todos te preguntan y la mayoría “está fatal” y hoy no será su día, y luego hacen marcazas. A mí, siempre que me preguntan, les digo que espectacular, pa meterme en almíbar.
Antes de entrar en más materia deportiva, nos gustaría conocer algún detalle de tu vida personal, como dónde resides y a qué te dedicas profesionalmente.
Culipardo por los cuatro costaos, de los muchos Quijotes que habitan La Mancha, estudié Derecho en Toledo, compañero del hoy presidente de Castilla La Mancha. Hicimos la carrera en la cafetería, jugando al mus, pero a él le ha ido un pelín mejor….o no. Soy funcionario de la Diputación de Ciudad Real, trabajo en el Servicio de Personal. A vuestra disposición.
Cuéntanos, ¿cómo se produjo tu llegada a PHI Grupo Polideportivo?
2016 fue un año muy difícil para mí, por enfermedades graves de mis padres. Terminé el maratón de Ciudad Real de ese año y me planteé dejar al margen un tiempo la competición. Como siempre había corrido independiente, no veía el estar en ningún equipo. Yo creía que esto de los equipos de algún modo te condicionaba a la hora de entrenar…..y llegó el tío Enrique, premio Impulso 2018, y me convenció. La verdad es que el granuja me convence para todo….y feliz, muy contento de la decisión.
Tu trayectoria anterior es también nutrida en participaciones. ¿cuáles fueron tus orígenes en este deporte?
He sido mas de deportes colectivos. Me gusta el fútbol y amo el baloncesto. El otro día vi en la web del Circuito que llevaba unos 75 diezmiles y 50 medias maratones, a las que añado 8 maratones. Si me lo dicen hace sólo siete años, cuando en el 2013 me inscribí al Circuito, no me lo creo. Mis primeros metros fueron tarde, pasados los 40, no soy atleta vocacional. En la Vía Verde , veía un mundo llegar al primer puente, ahora acabo en Alarcos recreando en mi mente la famosa batalla mientras subo su empinada cuesta, pensando que conmigo el rey Alfonso no habría sucumbido a los sarracenos. Si se quiere, se puede. Si sueñas con algo, ve a por ello.
¿Cómo valoras el ascenso del equipo? Has vivido, contribuido y disfrutado en los años más exitosos.
Cierto, dos subcampeonatos y la victoria del 2019. Me hubiera gustado estar antes, porque los que estáis desde entonces sois los auténticos artífices del éxito actual. Tan sólo llevo 4 años en el club, y parece que llevo toda la vida. Es impresionante el ascenso del equipo, con un Saturno que parecía inabordable, y que derrotamos con solvencia. Y no sólo a Saturno, porque hay equipazos en el Circuito. Lo que ha hecho este grupo ha sido muy difícil, pero muy optimista de cara a nuevas temporadas. La del 2020 la teníamos muy bien encarrilada.
Y llegó el campeonato en el Circuito de Carreras de Ciudad Real, un título que entendemos que te hace especial ilusión. “Campeonar”, como te gusta decir.
Emocionante. Tuvimos carreras épicas con menos componentes que nuestros rivales y logramos alzarnos con la victoria. Había gente que no apostaba por nosotros, pero ya antes del verano tenías los cálculos hechos, Rafa……”quiero irme a Atenas con el campeonato en el bolsillo”. Yo flipaba, porque esta conversación fue en marzo, en la celebración de mi cumpleaños, pero bebías una sin alcohol, que por la tarde corrías una legua o yo que sé. En fin, si tú lo tenías tan claro, que no sueltas prenda, era porque veías mejor que nadie que era nuestro año. Llegaron las temidas medias maratones de la segunda mitad del año, y lo bordamos. Fue maravilloso campeonar.
¿En qué modo has sentido durante estos años esa responsabilidad de tirar del carro en tu categoría?
El primer año más arropado, pero al pasar al máster 50, es cierto que estábamos pocos, creo que Agus, Barragán y yo. En el 2019 se unió Juli, ahora algunos más… Bueno, pues, hice lo que pude, estoy lejos de mis tiempos en el Circuito, pero disfruto como un enano cada día que me enroso.
¿Imaginabas realmente que sería posible elevar el discurso competitivo del equipo tras, presumiblemente, tocar techo con el subcampeonato, ante la hegemonía del anterior campeón y las circunstancias del momento?
Creo que eso sólo lo creías tú, Rafa. Mis primeros dos años, es que nos metían muchos puntos, aunque en el 2017 ya le ganamos alguna carrera. Eso sí, en el transcurso del 2019 lo empecé a ver pronto tan claro como tú. Les empezamos a ganar con menos componentes. Cuando estábamos sobre 40 compañeros, les derrotábamos. Lo vimos e hicimos piña. Y nuestras chicas estuvieron geniales. Fue fantástico. De todos modos, son muy buenos eso blues y han sido muchos años los mejores. Mi performance de Wallace en su feudo tenía su aquel. La pintura azul tornó a rosa.
¿Qué rasgos distinguirías en el equipo, con los que te sientas especialmente identificado?
Pues eso, EL EQUIPO. Hay auténticos flipaos de este deporte, con unas marcas impresionantes, corredores con marcas populares y deportistas en general que les encanta esta droga endorfínica y maravillosa entre los que me incluyo. A esto hay que añadir el cariño que nos tenemos muchos de nosotros y nosotras, y que no debemos perder para hacer grupo y volver a estar arriba. Muchas carreras las ganábamos desde la foto. Recuerdo los previos de Manzanares, Membrilla, Infantes, Corral, Puertollano…..irradiábamos felicidad, era una risa vernos, una auténtica piña.
¿Cuáles consideras que son tus puntos fuertes como corredor?
Yo soy el punto fuerte, estoy demasiado fuerte…….es broma. Mi complexión no es atlética, bueno, tal vez de lanzador de jabalina. Cuando mejor se corre es cuando tienes menos peso y mis mejores tiempos han sido en fechas dónde he estado más liviano. Ahora sufro en carrera por esos kilillos de más. Y bueno, soy un desastre, no llevo reloj, no sé de entrenos técnicos. Eso de series, fartlekes y demás me suena a cine coreano. Si destaco algo es la constancia y la cabezonería. Si me pongo las zapatillas es para acabar como mejor se esté física y mentalmente. Puerta grande o enfermería.
¿Y qué aspectos entiendes que podrías mejorar?
Supongo que mejoraría tomándome las cosas un pelín más en serio en los entrenos y cuidándome más físicamente, pero soy corredor popular 100%, eso os lo dejo a los pros. He estado en 42 minutos en el 10K, en 1:33 en el 21 y en 3:34 en la maratón. Son mis límites seguro y flípolo.
¿En qué distancias dirías que te sientes más cómodo o seguro?
El 10 me ansia, tanta prisa, tanta prisa….. Soy más gasoil, me quedo con las largas, siempre que estés bien, claro, pero las disfruto más. El maratón es la carrera metáfora de vida, me encanta, pero hay que respetarla siempre.
¿Cuál ha sido el momento más bonito que has vivido en este deporte?
Cruzar la línea de meta de una maratón es único. La de Valencia en el 2015 fue increíble por el ambientazo y también por hacer mi mejor tiempo. También destaco la media maratón Ciudad Real-Torralba. Me encanta el “to palante”. Disfruto también mucho con la gente. La verdad que en los pueblos es una maravilla el ambientazo. Esa mano de los peques buscando al corredor no tiene precio.
Y siempre hay algún día duro…
Aguantar al tío Enrique, antes de la carrera porque habla hasta con el apuntador, durante la carrera porque me machaca y postcarrera porque me tumba.
El sentido del humor por bandera, ¿cierto? para enfrentarte a la vida y las carreras. En el club apreciamos este rasgo de tu personalidad.
Es el sexto sentido y para mí el más importante. Un día sin sonreír es un día perdido. No dejéis de hacerlo.
¿Crees que, pese a ser así, el equipo logra proyectar buena parte de este “buen rollo”?¿Cuál crees que la percepción de nuestro sentido más competitivo? Ambas cosas pueden y deben convivir.
Deben convivir. Esos momentos previos a la carrera irradiando sonrisas y buen humor suma muchísimo. Luego hay que dar a las piernas, pero en ambas cosas, con todo respeto, somos los y las mejores.
Nos gustaría saber cómo enfocas tu preparación y alimentación. Sabemos que no eres de los que se privan del buen comer, pero ¿hasta qué punto fijas una línea roja en el cuidado?
Hasta que me veo como Don PimPom. No logro a partir de los 50 quitarme peso, ahora… qué bien lo cojo. En fin, no tengo una preparación para correr ni tampoco me obsesiono nada con la alimentación. Yo no sé qué hago aquí. Ahora, prometo llegar tipín al circuito en el 2021.
Y en los entrenamientos, ¿sigues algún tipo de método?
Un pie delante, que el otro te seguirá. Rock FM, carretera y manta.
Hablando de estos últimos meses, ¿en qué modo has afrontado el confinamiento, y cómo vives los actuales días sin carreras?
Mal, no lo he llevado bien. La competición me hacía no perder comba en los entrenos y el gimnasio. Llevo muy mal lo de estar sin carreras un domingo. Quién me lo iba a decir…
Más allá de este deporte, ¿cuáles son tus principales aficiones?
Decía el Quijote a su fiel Sancho que el que lee mucho y anda mucho, ve mucho y sabe mucho. Eso intento cumplirlo, en la lectura y en el camino, corriendo o viajando. Hay que disfrutar de la vida. Esto va más rápìdo que Santi en los primeros 100 metros de cada batalla. Sonriamos, amemos y viceversa.
¿Como corredor popular, qué objetivos te marcas a medio plazo?
Seguir poniéndome las zapatillas y la rosa mucho tiempo, y disfrutar con este equipazo en carrera y en esos post ya míticos de mesa blanca y jamón.
¿Qué le pides al futuro de PHI Grupo Polideportivo?
Que crezca y seamos los mejores en todo, nuevas secciones, nuevos proyectos y que sigamos unidos forever&ever. He dicho.